PACTAR CON EL DIABLO

Cuantas veces has llegado a casa con la frustración por camisa, desanudando la corbata como símbolo de deshonra, renegando de los colores del uniforme…. Ni me salen las cuentas, ni asoman las palabras. Carente de recursos ante un balcón tan desolador, victima de una guerra elegante.

Y sin embargo ahora la realidad se asemeja a la ficción, como un pacto con el diablo. Sin corbata si quiera, sin calentar antes de la acción, sin mirar de reojo, sospechar del enemigo, apenas trazas de un plan preconcebido, esbozos de una épica. En el pacto reza la victoria de un lado, estoy seguro, la parte que todavía desconozco es el precio a pagar.

La firma lo cambia todo, aire que no despeina, sombra que no cubre, agujas que pinchan en hueso, inmortal, joven, deseado. El pacto que no he firmado.

Quien no ha soñado despierto con ser inmortal, con volar, con ser joven eternamente, con ser rico o guapo para siempre. Deseos ocultos o públicos que nos sonrojan en pleno nirvana, pero deseos de verdad?. O son vacíos en si. Y si somos ricos pero dejamos de tener los amigos que ahora nos abrigan. Y si somos guapos, pero nuestra arrogancia aleja nuestros deseados. Y si somos inmortales y vemos morir una y otra vez a nuestro corazón.

Volveríamos la cara a la bondad…para reencontrarnos con ella en un tiempo futuro que esta vez si se antoja mejor.

Quien firmaría ese pacto con el diablo.


Pienso en ello cada día, sobre todo cuando veo todo rodar. Pero desde hace algún tiempo me juzgo casi a diario, me examino y corrijo para no cambiar de renglón. No me sirven los pactos. Sin volver la cara a mi esencia aglutino en mi interior un pensamiento. Si mañana terminase todo, estarías orgulloso de tu existencia?

Así que rompiendo con la eternidad, el nirvana, lo absurdo, lo divino y los malos pactos. Si todo empieza a rodar y hasta te consideras un afortunado, no lo desaproveches. No has sacado nota en este examen?, no esquilmes tu cabello, la solución es fácil, empieza mañana.