MARCHA CICLOTURISTA MARTINEZ OLIVER 2013 Pº25

Tenía ganas desde hacía un par de años de hacer una “ciclo”, y elegí esta por cercanía pero tb por el recorrido. Los puertos no son mi terreno, soy una castaña subiendo, pero lo que si me cautivaba era la escasa distancia a recorrer, anunciando 90km. Una vez comprobado que tras el accidente de hace 2 meses podía hacer 2-3h de una forma decente, me inscribí con mucha ilusión, sin duda la de quien ama competir y ha rondado por su cabeza el hecho de que quizás no podría volver a hacerlo. Esta clásica tiene un recorrido de 82km más la parte neutralizada, 1554mtrs ascendidos en los que sumamos alrededor de 30km de subida entre todos los puertos. Millares, Ricaveral, Illar y Sierra Alhamilla se presentaban como lugares donde suelo entrenar muy a menudo, pero nunca había competido en ellos y tenía curiosidad por ver que se sentía. 450 inscritos con una diversidad de niveles que iban desde la antesala del profesionalismo hasta el más dominguero amante del ciclismo, pero sin tiempo para salir más de un día/semana. Nosotros, los triatletas podemos tener un nivel aceptable, pero mi experiencia me dice que nunca como la de un ciclista, sobre todo en subidas. Así que con la humildad de un primerizo me sitúo de la mitad para atrás en el pelotón y dejo que la carrera me sitúe. Sin prisa pero sin pausa voy escalando posiciones llegando a situarme en las proximidades de gente que pesaba unos 15 kilos menos que yo. Los Primeros 30km son eminentemente de subida así que de momento no cobra especial relevancia el hecho de coger o no rueda, de modo que hago millares de menos a más (309w) y engancho con la cabeza en la pequeña bajada que le precede y el ricaveral a ritmo constante (286w) absorbiendo poco a poco las unidades que se descolgaban del grupo cabecero, el cual pierdo poco a poco hasta que la vista deja de alcanzarlo. Hago el amago dos veces de quitarme de la cabeza, sobre todo cnd el puerto empieza a tenderse en su segunda mitad, pero nadie coge el relevo que ofrezco y decido en ese instante que el entreno está servido. Decir que la prueba esta perfectamente escoltada por la guardia civil, que las motos de la organización hicieron de todo para que pudiéramos desarrollar la etapa con normalidad. Me detengo a poner un ejemplo. Terminado el ricaveral había un avituallamiento. Por mi costumbre en los triatlones, agoto el bidón y lo lanzo para que lo recojan cómodamente a la espera de pillar otro que lo sustituya, tenían fruta, botellas de 2litros y latas que por supuesto no ofrecen a mano alzada, sino en procedimiento tipo quiosco, te paras, te avituallas y sigues. Pues lógicamente no paré. Solución, llamar a una de las motos y explicarle la situación. Tras unos km el señor de la moto me esperaba en un repecho (que pasamos a más de 35km/h) para darme una botella de medio litro con tapon de rosca (Y gracias!!!!!!, mejor, mil gracias!!!!). Este procedimiento se reprodujo más tarde evitando que me deshidratara. Pero dejo la nota, para que si alguien la lee sirva para el año que viene. No pido acuarius, ni grandes lujos al llegar a meta, solo unos bidondillos a mano alzada en una zona dnd se sepa que vamos a pasar lentos. Prosigo, creo haber convencido a mi grupeta de que bajen medio contenidos y me comprometo a seguir tirando hasta meta, restaban más de 50km de modo que la oferta no era poca cosa, pero en la bajada de los catalanes las palabras se las llevó el poniente, me descuelgo (secuela de la caída) consiguiendo enlazar de nuevo con mi querida grupeta gracias a un par de km llaneando fuerte. De nuevo a tirar, subimos Illar, bajamos por Alhama, y seguimos recogiendo cadáveres del grupo de cabeza y ya van unos cuantos. Entre ellos mi querido amigo Quique (CSV) al que animo a unirse y del que imagino habría hecho labor de equipo hasta extenuarse. Que nivel tiene el bicho!. Seguimos nuestro camino encontrándome muy a gusto en el escasísimo llano dnd procuro no bajar de 250w y así hasta llegar a Sierra Alhamilla. 2º avituallamiento, vaso de agua y a subir los últimos 7km. Empezamos tranquilos, tengo curiosidad por ver si los que durante incontables km han estado a rueda, ahora sacarían super poderes para atacar en la ultima subida. Y los sacan, no me lo creo. El que caso es que me digo que llevo 2h a saco, por que me iba a importar hacer 20 minutos ON FIRE, así que sin miedo decido darlo todo hasta que no pudiera más. Salgo a tope y hasta meta, haciendo los últimos 6.6km a 308w, entrando en una más que digna 25º posición pero sobre todo muy feliz. Feliz por competir, por esforzarme, por conseguir cruzar otra meta, por que en una cama sin poder moverte y con lesiones graves piensas muchas veces que no vas a poder volver… Así que volver sabe mejor que “estar”, te hace verlo todo desde otra óptica, ver que no es poco lo que has conseguido, que te has superado de nuevo, que has vuelto sin duda y ahora eres mas fuerte si cabe. No es ni de lejos lo que más valoro de mi vida pero consigue día a día hacerme sentir vivo, así que espero de una forma u otra hacerlo siempre.