A estas alturas creo que los que me
conocéis ya sabéis todo lo que ha ocurrido, lo bueno y lo malo. Siempre hago
una crónica después de mis competiciones, y esta vez no va a ser diferente,
aunque si más doloroso.
Empezaré confesando que muy pronto, más
que un niño, me di cuenta de que todo me costaba más que a los demás. Si un
amigo necesitaba un día para sacar un notable en el cole yo necesitaba 3 días
para un 5. Si un colega jugaba al futbol bien por su calidad, yo necesitaba correr
el doble para lucir la mitad…y así en todo. En honor a esa forma de ser, diré
que sigo currando como el que más en todo lo que hago, y así he preparado este
IM.
A Niza viajé con mi pareja, y al día
siguiente llegó mi hermana y mis sobrinos Emilio y Alex. De modo que apoyo no
me falto ni un solo instante. Nos alojamos en un apartahotel muy cerca de la
zona de meta y los días previos pasaron en una especie de calma tensa. Una
mezcla de ilusión y mucho respeto a la prueba, algo así como lo siente un estudiante
cuando ha preparado con toda su voluntad un examen. Ganas de hacerlo bien
mezcladas con un acojone importante.
La noche previa ya sabéis como es. Cena a
las 7-8 de la tarde, intentar dormir a una hora imposible y darle vueltas y más
vueltas a la cama deseando que sean las 4.00 de la mañana para empezar nuestro
gran día, ese que hemos preparado con tantísimo esfuerzo y cariño.
Llegamos a la zona de boxes donde realizo
el protocolo de costumbre. Bidones, ruedas, servicio, neopreno. Estoy
relativamente tranquilo y me dedico a visualizar lo que me espera. Tomo
referencias de donde se encuentra la bici, las bolsas y el sentido en el que he
de recorrer la transición para no tener dudas en carrera. Todo OK y a la
salida. Caliento 200mtrs y me siento en primera fila del cajón de menos de 55´.
Veo a los míos colocados en un sitio espectacular y tan solo añoro tener cerca
de alguno de mis amigotes con lo que suelo compartir competiciones. Los
“pantalones” que me suelen acompañar en las competiciones han llegado a tiempo
y me siento con muchísima motivación y las ideas muy claras de cómo voy a
arrancar esta competición.
A las 6.25 dan la salida de los Pro unos
50mtrs mar adentro, son pocos y no es muy espectacular. A los 5´dan nuestra
salida, mas de 2.700 personas se adentran en un mar en calma justo al amanecer,
debe ser espectacular desde fuera. Desde dentro es otra cosa. Para no hacerme
daño con los cantos rodados de la orilla (ni un gramo de arena) me tiro rápido
al agua y lo doy absolutamente todo para no verme atrapado entre la gente. Se
sale fortísimo y tan solo voy pensando en aguantar de 20 en 20 metros. Me digo
“aguanta un poco más, un poco más, un poco más…” y parece no terminar nunca ese
instante en el que no puedo bajar el nivel de esfuerzo. Es agónico. Lógicamente
me llevo algunos buenos palos a los que respondo con evasivas, no perdiendo
energías en nada más que en evitar contacto, Pero el damnificado es mi Bryton
que se lo traga el Mediterraneo. Cuando llevamos 500-600mtrs todo empieza a
estirase y ordenarse, me veo en cabeza junto a 4-5 más y vamos a un ritmo
brutal, pero es mi día y no pienso renunciar a una buena natación, la mejor de
mi vida. Nunca me he esforzado tanto.
Cuando llevamos 1.400-500mtrs aprox. el
ritmo baja lo justo para no colapsarme, voy a tope pero un tope más sostenible
y así terminamos la primera vuelta (2.400). Veo con asombro al salir del agua
que voy en el grupo de cabeza, piragua incluida, menuda currada ufff, incluso
me parece ver un grupo de pros tan solo unos metros delante nuestra. Veo a mi
familia y les saludo en el punto de giro para regresar al agua pq creo que no
me han visto;-) y de nuevo nos tiramos al agua intentando sobrevivir a las
duras piedras de la orilla. Segunda vuelta (1400) un punto más relajada y a T1
pasando el reloj en 58 min clavados, así que he nadado en menos de 53 minutos,
voy el 5º de todos los grupos de edad y el 14º de la general. Me parece
escuchar ánimos para Víctor del Corral que ha salido 5´antes pero me parece
surrealista y sigo a lo mío. T1 normal, “a bolsas” en la que cojo el dorsal con
los dientes mientras me pongo el casco corriendo y luego el dorsal. No me pongo
calcetines, línea de montaje y a por los 180km.
Mi actitud al comenzar no es de empezar
tranquilo pq queda mucho, sino la de “ahora tocan 20km llanos que es lo tuyo” y
el ritmo se parece más al de ½ IM. Al salir de Promenade se levanta un viento
de cara bastante fuerte, que luego se tornaría en la dirección contraria a la
vuelta por el mismo punto, lo cual hizo lentos los tiempos en bici. Pronto
llega el primer repecho de unos 600 mtrs con pendiente que llega al 18%, voy
completamente solo y creo entender que voy entre los 20 primeros. A este
repecho le sigue otra subida encadenada de unos 4 km sin mucho desnivel y una
zona mas larga que sigue ascendente pero mucho más rápida que desemboca en el
km 48-49 en el inicio del Col de l´Ecre. En uno de los repechos donde quito el
plato se me sale la cadena, pierdo un minutito que me pone algo nervioso pero
se arregla rápido y a seguir igual. Mi estrategia en los puertos es la misma
siempre, empiezo a ritmo y el ultimo tercio a saco y a respirar en la bajada.
Pierdo algún puesto pero ninguno es de mi GGEE.
Sobre el km 68-69 se termina el puerto,
hay un avituallamiento especial (Special Needs), y aquí llega la madre del
cordero. Llevo varios km con un bidón vacío del que me quiero deshacer, y
entiendo que este punto es el avituallamiento que toca y no habrá otro hasta
20-30km después. No tiene zona “eco” pero hay dos triatletas parados dejando su
bidón y cogiendo su special needs. Varios voluntarios los rodean y yo lanzo el
mío a los pies de un voluntario para que lo recoja. Una moto que me acompaña
casi todo el rato, y va unos 20mtrs tras de mi, se acerca a reprocharme ese
acto. Lógicamente mi intención no es la de ensuciar el entorno, por eso lo
lance a los pies de un voluntario. Pero en un Francés que no entiendo logro
discernir que el lugar no era el habilitado para residuos. La juez maneja en
las manos unas tarjetas de plástico y mantiene una conversación con el piloto
de la moto. Yo le pregunto que si estoy amonestado, sancionado a penalti Box o
descalificado…no me contesta y sigue hablando con el piloto. Le pido que me
hable en ingles. No es que yo lo hable fluido, pero algo puedo entender más que
el Francés. No me paran, no me dejan claro que sucede, no me muestran una
tarjeta, comienza la bajada y todo termina con un go-go-go. Todos los
triatlones de media y larga distancia en los que he competido han tenido una
zona especial para tirar nuestros residuos, lógico, imaginad que tiramos miles
de bidones al medio ambiente, menudo desastre. Yo siempre los he respetado y
los envoltorios de barritas, sales, geles etc los guardo en la pierna, entre
piel y mono, aunq a veces se hace incomodo al pedalear hasta llegar a T2. Aquí
lance el bidón en un lugar erróneo pensando que al ser una zona de
avituallamiento y con voluntarios, era equivalente. 2km después estaba situado
el avituallamiento “ordinario” y me quedé un poco con cara de tonto al ver la
zona “eco”.
Sin más, seguí compitiendo. Pensé que era
un reproche, como otras veces se ha acercado un juez a advertirte que no estas
a 10mtrs sino sobre 8 y que te separes algo más. Pues estupendo, haces caso a
las instrucciones, pones mayor cuidado y sigues. La verdad es que no le di
mucha importancia hasta la mañana del lunes cuando vi que me quitaban de la
clasificación. Pasan 3h de bici y llevo 241w medios, me siento genial.
Siguen dos subidas de unos 5-7km y otras
dos de 2-3km con zonas espectaculares, hasta llegar al km 120 donde todo torna
en descendente. A partir del km 135-40 empieza una bajada bastante peligrosa
con travesías de pueblos y un asfalto que en puntos concretos presenta bacheado
peligroso. Me pasa un grupo a una velocidad brutal, la verdad es que fuí muy
conservador en las bajadas durante todo el día.
Llevo a los últimos 20km y las piernas
van de cine rodando de nuevo entre 240 y 270w. Los km de bajadas han reducido
la media de watios y subido la velocidad y al legar a T2 llevo 208 medios y
173km pues Niza está algo corto en este sector. He podido comer muy correcto.
Un bidón de medio litro con 3 geles de fresa de 226ers y 1 de café con cafeína,
otro de 750 con 6 geles, 4 normales y 2 con cafeína y dos capsulas de sales
Sub-9 que van de autentico lujo. Y dos barritas de 226ers que consumo durante
las bajadas.
He perdido algunos puestos en estas 5h17,
y considero que ha sido una bici lenta para lo que tenía pensado, pero me bajo
a correr 4º de mi grupo de edad con solo uno fuera de mi alcance (quedó 4º de
la general). Transición algo lenta por tirar mis residuos a la bolsa donde dejé
el casco, por ponerme los calcetines etc y a correr con un calor importante y
muy poco aire que refresque.
Salgo a ritmo controlado, sin referencias
pues perdí mi Bryton en el agua pero con el respeto de lo que quedaba por
delante. Escucho los ánimos de los míos que aguantan el calor poniéndome su
mejor sonrisa, impagable. Alex y Natalia han alquilado una bici para poder
seguirme aunque sea de lejos.

Primeros
5km a 4.04 (sin saberlo), siguientes 5km a 4.12…y así voy dejando caer
la velocidad según me va pidiendo el cuerpo. Intento no “saltar” corriendo,
llevar mucha cadencia, no hacer daño. No paso por las duchas para no mojar mis
pies y evitar ampollas. Caen otros 11 geles y una capsula de sales más. Me
entra todo y el estomago va tan de cine que ni me acuerdo de él. Cuido la
hidratación en cada avituallamiento, todo marcha. Natalia y Alex me cantan que
he adelantado a uno de mi grupo y otro ha petado justo cuando me pasa “Momo”
volando (2.54), así que voy 3º y el 4º va a 8 minutos. Sigo bajando el ritmo
según me pide el cuerpo y paso la media maratón bastante entero. La verdad es
que no puedo contar mucho más. Sobre el km 32-33 ya estoy deseando terminar,
logro correr por debajo de 4.50 todo el rato hasta en mis peores momentos, se
nota de más el calor, es asfixiante y tiro de duchas en la ultima vuelta ya sin
miedo de sufrir ampollas muchos km. Como siempre que se acerca una meta las
piernas rejuvenecen decenas de km atrás y a falta de 500mtrs no puedo dejar de
llorar tras mis gafas. 3h11 de maratón, la mejor que he corrido en IM, con el
calorazo que pegaba!
Han sido varios meses de mucho esfuerzo y
sacrificio preparando esta prueba. No solo mío, sino de todo mi entorno. He
currado sacando lo mejor de mi, no valgo más que lo que di ese 28 de junio
desde las 6.30 de la mañana hasta cruzar la meta. Como siempre que doy lo mejor
de mi, me acuerdo de mi madre, y le dedico mi victoria a ella. Siento el
orgullo de haber conseguido un objetivo que me hacía despertar cada mañana con ilusión
y felicidad. Me siento bien conmigo mismo por la determinación con la que he
afrontado el proceso. Me acuerdo de todos los amigos que han compartido
entrenos conmigo, que han sido muchos. De mi entrenador Gelo que sabe sacar lo
mejor de un aficionado como yo, de Bego, de mi familia, los que están y los que
no han podido venir, de mi padre que siempre me apoya y me pregunta por los km
que he hecho “ese día” y por que pueblos he pasado. Un objetivo y un sueño,
todo en uno.
Ya sabéis el final de la historia. Por la
noche a las 10 era el 19º de la general, 3º de mi grupo de edad y había
conseguido Slot para Hawaii. Al despertar a las 8 de la mañana estaba
descalificado. Un día duro. Hablamos con el director de carrera e intentamos
recurrir o reclamar, como minimo poder contrastar información con la Juez que
sancionó. Pero este empresa entiende la justicia de una forma muy particular.
A toro pasado contaros, amigos míos, que
no cambio vuestros mensajes y llamadas de apoyo, animo y cariño por ningún
Hawaii, me habéis abrumado completamente. Y que de momento he dejado de
compartir el sueño que la WTC quiere que tengamos los triatletas.