70.3 BCN se presentaba como una prueba
que me hacía especial ilusión. Carlos, un amigo con el que comparto entrenos y
club estaba ya clasificado para el mundial 70.3 que este año se celebra en
Europa, y me hacia “tilín” acompañarlo. La empresa no era fácil pues el nivel,
no solo en pros, de GGEE era bastante alto y el numero de extranjeros superior
al nacional, con lo cual las incógnitas se multiplicaban. Aun así la semana de
entrenos fue mixta por así decirlo. No terminó de ser de volumen IM puro, pero
tampoco fue de descarga o puesta a punto. Aún así el día de la prueba yo me
encontraba muy bien.
Natalia me acompañó a este largo viaje y
la verdad es que nos dio para hacer un poco de todo. Paseo por el barrio Gótico
y las Ramblas, plan tranquilo por Calella y día de competición y viaje de
vuelta mortal.
El recorrido de agua lo pruebo un poquito
junto a Francis Martos de El Ejido. Y el de bici lo comento con Eloy, un amigo
de Barcelona que me dice los km dnd están los puntos peligrosos, me avisa de
algunos dnd guardar o apretar que el perfil no refleja bien. Mala suerte para
este debutante que rompió la cadena en el km 17;-( Vaya dos gafes!
La salida era a las 7 de la mañana con el
consecuente madrugón y mal dormir, pero con las ganas intactas. La opción que
da la empresa IM para ordenar la salida me parece un acierto. La gente
(haciendo honor a la verdad) ha de colocarse en un cajón de tiempo en el agua y
no por grupos de edad. Con lo cual se pueden dar varias salidas cada dos
minutos, no empezar con una salida masificada y de paso evitar que las salidas
posteriores se “coman” a los peores nadadores de las salidas anteriores. El
chip canta a la entrada del agua y ese es tu punto de cronometraje, sin más.
Incluso pudiendo salir 15´más tarde a tu libre albedrío para evitar agobios.
Me coloco en la de menos de 30´aunque no
puedo elegir mi querido lado derecho por que estamos como sardinas en lata y
estoy al lado izquierdo del todo. Dan la salida y puedo escorarme sin pillar ni
un palo pero sin tener referencias de cómo van los demás por mi derecha. Llego
a la primera boya entre los 5 primeros, hay un poco de aglomeración y decido
seguir abierto aunque me pasen algunos. Me coloco a pies y se hace una fila que
se rompe 100mtrs más adelante e intento enlazar de nuevo, pero 5-6 minutos de
calentón no son suficientes y desisto. El resto de la natación la hago en
solitario viendo como el grupo me va sacando progresivamente tiempo que se
estanca en unos 40-50 segundos. Por el camino logro alcanzar algunas chicas Pro
que habían salido 3´antes y chicos Pro que habían salido 5´antes. 3º de mi GGEE
toco tierra y 13º de todos los grupos en la salida “rápida”. NO es mi mejor
natación por sensaciones ni de lejos, pero se que no he gastado nada.
Transición normal, “a bolsas” y a por la
bici. Salgo de Calella con cuidado, esa zona de baches y curvas ratoneras por
el pueblo es un suplicio, salimos a la Nacional II para hacer unos 4-5 km por
ella bastante rápidos pero en seguida nos adentramos hacia el interior. El
terreno se torna en ligera subida pero para hacer acoplado terminando en el
primer puertecillo de la jornada con 2-3 km algo más duros donde las
sensaciones son buenas. Pero terminando el puerto noto algo raro, un sentimiento
contradictorio. Pedaleo con fuerza pero me pasa alguno y no soy capaz de
mantener referencias. Comienzo la bajada y en una curva bastante pronunciada, freno
pero la bici me hace unas cosas extrañísimas que en un primer análisis ultrarrápido
achaco a que he pisado humedad o algunas hojas…pero el caso es que voy a 50kmh
a escasos metros de la curva ya que no esta frenando lo que debiera, derrapa,
estoy a punto de ir al suelo. Ya se que me la voy a dar y solo puedo elegir el
modo. Decido continuar frenando en recto y chocar contra el monte. Suerte que
no había rocas, sino tierra suelta y bastante vegetación. NO me hago mucho
daño, no hay quemaduras, pero la tensión y el golpe me hacen quedarme más tieso
que un palo, contracturado en cuello y sobre todo cadera y glúteos. Rápido me
subo en la bici sin querer perder ni un minuto pero en la siguiente curva (a la
que llego mucho más lento) vuelve a ocurrir. Esta vez me bajo y compruebo….he
pinchado. Vísteme despacio que tengo prisa, solía decir Napoleón. Así que con
cierta calma reparo a toda prisa el pinchazo cambiando la cámara. El co2 no me
da la presión optima pero puedo seguir.
No se si es normal o no, pero tras el
susto el cuerpo se vino a menos. NO podía mantener la tensión de competir y
cada pedalada era un suplicio. Pienso en dar la vuelta pero por otro lado sigo
queriendo intentarlo. Al final gana el hecho de que a Natalia le he dado una
referencia de tiempo en la bici(2h35 aprox) y si me ve llegar 30´despues le da
un infarto, de modo que sigo. Como voy en puestos medios puedo comprobar en mis
propias carnes lo que sucede cuando no hay jueces ni puestos de honor, o mejor,
personas de honor. Que cantidad de grupos. Pero es que algunos pedían relevos y
todo, no me lo podía creer. En fin.
El recorrido preciosísimo, pero quizás
por lo atravesado que iba con la caída y el mal cuerpo me parecieron demasiadas
curvas de herradura, algunas zonas muy mal asfaltadas (vi muchas caídas y
muchísimos pinchazos) y en general un recorrido que no me sedujo en absoluto.
En el triatlón Cabo de gata tenemos un desnivel parecido y 0% de riesgo y mal
asfalto.
Llego a T2 retirado y bastante triste,
pero deportivamente de una pieza e intacto para afrontar en 45 días el IM Niza
y personalmente la compañía de Natalia me hace hasta reírme de lo sucedido.
Tonterías para lo que podía haber pasado y para las cosas que “pasan”.
Como siempre hay que aprender de todo y
sacar lo positivo. A Niza sin la “película” de que es objetivo…nervios etc.
Darlo todo como siempre pero como si fuera a hacer el “olímpico del Zapillo”. A
poner unas cubiertas que no sean de competición. Gorditas, que no pinchen y
agarren. Cuidadito en las bajadas y demás situaciones de carrera que nos hacen
perder unos segundos o ganar una línea de meta…
Por último no puedo despedirme sin dar un
millón de gracias a los mensajes que tanto amigos como familia me habéis
mandado preocupándoos por la caída o retirada. Ese minutito que habéis invertido
no tiene precio para mi. Abrazo a todos.